De todas las promesas que hiciste para este 2018, ¿en cuántas estás trabajando? Si eres como la gran mayoría, pensarás que ya han pasado algunos meses para hacerlas realidad. Desafortunadamente, así como pasaron estos meses, pasará todo el año y algunas de las promesas pasarán al 2019. ¿Qué podemos hacer al respecto? ¿Cómo cumplir las metas que me propuse al iniciar el año?
Después de encontrar que tenemos un 33% más de probabilidad de cumplir nuestras metas si nos aferramos a ellas durante 30 días seguidos, Rory Vaden, conferencista, co-fundador de Southwestern Consulting y autor del Best Seller Take the stairs: 7 Steps to Achieving True Success, comparte 4 tips que le han permitido cumplir lo que se propone:
Cómo cumplir todo lo que me propuse al iniciar el año.
1. Las promesas son para cada día.
Planteemos 2 escenarios. Uno en el que queremos alimentarnos mejor durante este 2016 y otro en que nos comprometemos a alimentarnos mejor durante todos los días de 2016. ¿Parece lo mismo, verdad? En teoría sí, en la práctica no. Siempre que tengamos la posibilidad de empezar a “negociar” con nosotros mismos damos lugar a faltar a nuestra palabra. Ejemplo: Si podemos decir “empiezo en marzo y como bien durante 10 meses” ¡ya habrás perdido 2 meses! Mientras que haciendo compromisos que involucran el día a día no dejamos margen de error.
2. No dejes de trabajar por tu meta.
Rory dice que una gran promesa no es una promesa gigante, es una que podamos cumplir. Esta claro que no siempre será posible cumplir con tus objetivos diarios, ya sea porque estás enfermo, viajando o trabajando horas de más; lo importante es hacer al menos algo por avanzar hacia la meta. En el caso de Rory, su meta era ejercitarse todos los días del año, cuando no podía ir al gimnasio y hacer su rutina completa, encontraba el tiempo y el lugar para hacer algo de ejercicio para así mantenerse en forma y enfocado.
3. Prepara lo necesario para poder cumplir con tu meta siempre.
Sigamos con el ejemplo de la alimentación sana. Si sabes que te vas de camping y no será fácil conseguir la comida indicada para tu propósito, adelántate y consigue lo que necesites llevar para ser fiel a tu meta. Si sabes que tu oficina está rodeada de restaurantes de comida rápida, ¡prepara el almuerzo en casa y llévalo al trabajo!
Prever es fundamental para no inundarnos de excusas y perder el norte.
4. Haz mediciones.
Una meta bastante común es la de bajar de peso. ¿Cómo haces para saber si estás perdiendo eso kilos de más? ¡Pesándote! Medir nuestro progreso constantemente nos permitirá saber si estamos cumpliendo, y en caso de no ser así, nos permitirá saber que debemos cambiar algo.
Rory enfatiza la necesidad de ser objetivos y no emocionales y subjetivos. ¿A qué se refiere? Simple, no basta con preguntarle a nuestra pareja si nos ve más delgados, ya que de esta manera dejamos que su amor por nosotros empañe una respuesta honesta. Debemos dejar el temor al lado y afrontar nuestro progreso con números.
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