Trabajar en casa, algunas veces es visto desde una perspectiva negativa. Se suele pensar que es una forma de evitar el trabajo duro y de incentivar la pereza; pues al no tener a los jefes encima no es necesario preocuparse.
De hecho, esta práctica va en contra de la idea de tener un lugar de trabajo colaborativo e innovador, donde todos participan e interactúan, para resolver problemas, desarrollar proyectos y generar nuevas ideas.
Incluso si tienes la suerte de trabajar desde tu residencia, algunos de tus amigos o incluso familiares, pensarán que podrías conseguir un trabajo más serio.
Esa es la tendencia, lo que nos han inculcado desde pequeños. Que el éxito está relacionado con nuestra forma de vestir, la oficina, el carro y el lugar donde vives.
No obstante, el profesor de negocios de la Universidad de Stanford, Nicholas Bloom, afirma que obligar a los empleados a estar en la oficina es una tradición obsoleta; establecida durante la Revolución Industrial.
Dicha inflexibilidad ignora los sofisticados métodos de comunicación actuales. Además de los viajes largos de la casa al trabajo.
En su TED Talk, Bloom explica que el trabajo desde casa es potencialmente tan poderoso e innovador como el automóvil sin conductor.
Como evidencia, Bloom analizo la compañía Ctrip, una de las agencias de viaje más grandes de China con 20.000 empleados y con una capitalización de alrededor de 20 millones de dólares.
Los líderes de la compañía, conscientes de los elevados costos de las propiedades en Shanghai, estaban interesados en conocer el impacto de trabajar en casa e iniciaron un estudio para saber si podrían seguir creciendo mientras evitan los costos exorbitantes del espacio de oficina.
¿Crees que trabajar en casa permite a las empresas seguir creciendo, o que les impide avanzar?
Veamos lo que sucedió…
En el estudio se le permitió a la mitad del personal trabajar desde su hogar durante cuatro días a la semana; mientras que la otra mitad tenia que ir a la oficina cinco días a la semana.
El estudio de dos años, reveló que los empleados que trabajaron en casa tuvieron un aumento masivo en productividad, casi equivalente a un día laboral adicional.
Esto se debió principalmente a tener menos distracciones y menos conversaciones sin sentido. Menos lobby y más trabajo.
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Adicionalmente, los empleados que trabajan en casa, no quieren perder este privilegio, por lo cual tienden a permanecer más tiempo en sus trabajos; disminuyendo la rotación de personal.
Esto resulta en una gran ventaja para la gerencia, pues el retiro de un empleado decanta en una costosa pérdida de habilidades y conexiones.
Finalmente, los empleados que trabajaron en casa eran más felices y, por lo tanto, más sanos; reduciendo los días de enfermedad y el ausentismo. Esto disminuyó los gastos generales de atención médica de la compañía.
Además, Bloom afirmó que la empresa instituyó el trabajo en casa como una nueva opción para todos los empleados; pues reportó un aumento en las ganancias de $2000 dólares por empleado.
Contradiciendo muchas de las opiniones y los estándares actuales, este estudio ha demostrado que una oficina, no solo es un costo más para una compañía. También puede ser un gran distractor para los empleados, quienes a fin de cuentas, no necesitan a un jefe que les este respirando en el cuello para generar resultados.
Esperamos que esta información te motive e instruya para cuando tengas tu empresa, o modifiques la visión del negocio que ya tienes 🙂
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